miércoles, 1 de diciembre de 2010

Ensayo académico.


El fin justifica los medios
Notas sobre “mi hermano el alcalde”

Por: Juan Pablo Arroyave Hurtado

Corrupción, mentiras, engaños, muerte, traición, oportunismo y aflixión: cualidades innatas de lo que representa una campaña política, o en otras palabras, la búsqueda del “poder legal” en Colombia (y en cualquier otro sitio). Y naturalmente, ¿quien mejor que Fernando Vallejo, para exponernos esta situación tan lamentable y real como la temporada de lluvias en dicho país?

Es en: “mi hermano el alcalde” donde, con toda seguridad, se podrá ver reflejada esta realidad que concierne a toda una nación. Lógicamente, con el toque irónico  y humorístico que le caracteriza; y con una serie de relatos que enviciaran al lector (por decirlo de algún modo) a la mencionada historia.

No debe nunca confundirse una postura pesimista con una muestra de la realidad (aunque al fin y al cabo ¿cual es la verdad y la realidad?, de igual modo este tema no nos compete tratar). Este, en definitiva, es un error muy cometido por todo tipo de personas a la hora de leer e interpretar un autor como Vallejo.

Y es que, a pesar de que la subjetividad del procesamiento de la intención y la información se tornan demasiado inclinadas, existen premisas y afirmaciones que deben ser analizadas desde un punto de vista más objetivo.
También, me permito decir que es un tanto llamativo e inquietante escribir sobre una obra de dicho autor.

Basta únicamente con dar una mirada a sus antecedentes y anteriores publicaciones, tales como: la puta de babilonia, la virgen de los sicarios, el desbarrancadero, etc. Para tener una visión mas clara y acertada de su intención con los lectores, de su postura ante el mundo y de la argumentación que plantea acerca de múltiples temas.
Vallejo, siempre tiene presente la realidad que vive “su pueblo”. Jamás omite ningún detalle que tenga que ver con lo que desea exponer, y siempre tiene muy claro que las cosas deben decirse como son: sin rodeos y sin maquillaje.

“Mi hermano el alcalde”, puede indudablemente, ser una síntesis precisa del desempeño de una campaña política promedio en Colombia. No en términos cuantitativos, pero si en cualitativos.
En dicho texto, el lector podrá encontrar multiplicidad de acontecimientos que son tan cotidianos como las muertes que quedan en la impunidad; y por otro lado, una serie de eventos que son particulares de la campaña. 
En definitiva, se dejara expuesto el sentido que adquiere el titulo de este ensayo “el fin justifica los medios”. ¡Claro que los justifica! (dirán mentalmente aquellos seres humanos con esa insaciable hambre de poder).

Ahora, será necesario hacer un recorrido tanto general, como especifico de la vida de nuestro personaje principal: Carlos Vallejo, quien fuera alcalde de Támesis; y que trae detrás de si todas las maravillas y las enseñanzas de la democracia partidista y oportunista del país: Involucrando a familiares, amigos, pareja(s) y cabezas alienadas por el corrosivo humo de la conveniencia.

La sagrada familia:
Para que un gobernante haya llegado al puesto que posee, es preciso haber recibido el apoyo de gran cantidad de personas. Por lo general, el de su familia se vuelve la base y la piedra angular en los momentos difíciles para soportar la presión, la critica, las adversidades y las desavenencias con las que se encontrara día tras día en el arduo y duro camino hacia su meta.

Independientemente de la estrategia usada en la campaña, y los métodos de persuasión utilizados con cada uno de los votantes; la familia de aquel candidato, diríamos, que esta en la obligación (ya sea moral, filial o afectiva) de acompañarle en cada paso y cada decisión tomada. Y en el caso de Carlos no hay excepción a esta afirmación
Por supuesto, existen muchas clases de familias en todo el mundo, y para clasificar cada una (aunque realmente seria una ardua e inexacta tarea) tendríamos que ver que en gran parte depende del entorno sociocultural en el que se viva.
Por ejemplo: una familia londinense presenta unas características particulares que fácilmente la diferencian de otra que viva en irán, y a su vez esta es distinta de una familia japonesa. Todo esto, debido al medio en el que viven y las relaciones que establecen con los conciudadanos que traen consigo una tradición de siglos.
La relevancia de estas apreciaciones, radica en la intención de describir no con estigmatizaciones, sino con símbolos y hechos culturales lo que llamamos una típica familia antioqueña, cuyas tradiciones no dejan de oscilar de las establecidas y vividas en los siglos XIX y XX.

La idea de familia antioqueña, siempre estuvo ligada a la cantidad: ya sea en lo que respecta a los hijos, la alimentación o la cualidad y/o defecto.  Esta cantidad un poco desmesurada, se da visiblemente sin ningún tipo de premeditación aparente;  y con un optimismo en la vida, y en los valores y normas incansable.

Los padres son los encargados de educar por el camino del bien a sus hijos. Que se conviertan en seres útiles para la sociedad es su deseo, o al menos esa es la idea inicial: productivos y bienhechores.

De la mano con esto, el vínculo filial que se crea entre los hermanos, difiere de acuerdo a la cantidad, y a la situación en la que estos vivan. En el caso particular de la historia aludida previamente, podemos dar cuenta de esto: la campaña carlista no es la más limpia, pero tampoco la más sucia.
De hecho, como Vallejo lo menciona en múltiples ocasiones: “Carlos fue muy güevon” (Vallejo F. 2004); pero aun así, sus hermanos y  familia siempre estuvieron allí. 
Carlos fue un alcalde que siempre deseo el bien para su pueblo (tal y como lo hacen todos los gobernantes); y sabiendo lo difícil que es persuadir a un campesino, o un analfabeta con tecnicismos y proyectos que al parecer en nada mejoraran su vida, supo crear estrategias para conseguir esos votos, fuese como fuese.
Quisieran o no quisieran, Carlos fue elegido. Elegido por los carniceros, verduleros, profesores, campesinos, padres madres, abuelos e hijos. Támesis eligió a su alcalde; aunque, hay que reconocer que no todos votaron estando despiertos y mucho menos sabiendo leer o escribir.

Evidentemente, Carlos tenia sus metas fijas e intactas; sin embargo, su familia no estaba muy de acuerdo en los medios que utilizaba para conseguir dicho fin.
Todos sus hermanos habían sido criados con una misma premisa religiosa y esto, sin duda, contribuye a que la moral en cuanto a las acciones que este realizaba, se manifiesten en discrepancias a diferentes actos (aunque hay que reconocer que no pareció importarles las inclinaciones de su hermano).

A decir verdad, la antigua mentalidad campesina, y la convicción católica que permeaban las costumbres en Antioquia, definitivamente dejan mucho que desear en términos de la igualdad.

Estamos de acuerdo en que la solidaridad, la compañía, el apoyo y la confianza son cualidades y valores útiles; sin embargo, hay características primarias en esas familias que dejan a sus próximas generaciones una herencia que va mas halla de la honestidad y la buena moral.

“La tragedia de Antioquia, ha sido tener hijos para después dividir” (Vallejo F. 2004, p 87). Mejor no lo pudo haber dicho nuestro querido autor. He aquí la falla en la historia. Tan sustancial y relevante como las leyes para proteger el medio ambiente. La división de los bienes en pequeñas cantidades a gran población, tranquilamente pueden trascender a la creación de conflictos entre esos hermanos; pero,  esta idea sirve solo para empañar la cultura, por ahora es pertinente trascender en este tema.

Una campaña limpia:
El apoyo de la familia es importante, pero es el apoyo del pueblo y la comunidad el que llevan a un hombre a ser elegido como gobernante. Ya sea en Colombia, en México, en España o en cualquier sitio del mundo donde reine la democracia, y hallan elecciones populares para la elección, todos los candidatos deben sacar al viento su mejor retorica y su mejor postura ante la situación.

No interesa el sitio en el que se de la campaña política, importa el modo en que se desenvuelve, y como se ven involucradas las poblaciones. No voy a hablar de lo mismo que se oye en cantinas, fiestas y diarios en todo momento: dicen, prometen y no hacen nada (excepto robar y no hacer lo que prometen). No, eso ya lo sabemos, ahora es justo decir que antes de llegar hasta arriba, ¿que hicieron abajo y en el camino?.

Aunque, podríamos pensar en algo: Carlos, gano las elecciones sobre “el negro Alirio” (otro gañan que conseguía votos a cualquier costo)  que tenia en mente la alcaldía, aparentemente, solo para preñar y beber; porque, saco a votar a los muertos. Hasta su difunto padre se vio involucrado en esta situación.

Es mas, que el mismo Vallejo nos describa la situación en sus palabras textuales: “El voto de las putas, monjas y muertos le valió la campaña” (Vallejo F. 2004, p62);  Carlos, saco a votar a los muertos. ¿Cuántos de nuestros antiguos gobernantes no lo hicieron antes?, el que este libre de este crimen que arroje la primera piedra. Seguramente habrán unos que las puedan tirar, pero fijo, otros que no.

Si no es por los muertos, seguro que Carlos no gana, la votación fue estrecha y al final, lo mejor para el pueblo fue que el hubiera sido el alcalde. las putas, las monjas, los campesinos y hasta los verduleros y carniceros (que posteriormente iba a destronar del parque) fueron participes de la hazaña.

Hazaña que involucro a toda la familia. Por ejemplo, podemos aludir a aquellas noches de reclutamiento de votos, donde en la finca mas hermosa de Colombia, según Vallejo, se llevaban acabo los mas gloriosos y monumentales ágapes.
Aquellas reuniones que se postergaban por horas (incluso en ciertas ocasiones pasaban de los dos días) congregaban a propios y extraños en lo que respecta al electorado oficial de Támesis. Incluían, entre otras cosas: amabilidad por parte de los anfitriones, licor para el que le gustara tomar, mucha comida, para los que quisieran comer, música para los que quisieran bailar, un cuarto oscuro para quienes desearan entrar, baños, etc.

Es, sin duda alguna, placentero y divertido  reunirse de vez en cuando con los amigos y colegas para pasar un buen rato. El problema empieza a surgir, cuando no conoces a los amigos que van a la reunión, y las reuniones son cada semana.

Al pueblo hay que darle pan y circo, y aquí queda demostrado que esta es una de las pocas maneras de conquistar las complejas y trabajadas mentes de los ciudadanos promedio: que tiene muy claro que “el doctor” es el que les va a solucionar todos sus problemas, y que la miseria, el hambre y la pobreza serán palabras que habrán de desaparecer de sus vocablos.

Carlos, como nos lo muestra el autor, puede definirse así: hombre culto, con una educación envidiable (latín y español dominaba ala perfección), cultivado en valores desde la cuna, políticamente correcto (porque en la política, al parecer, todo es correcto) hijo ejemplar, hermano ejemplar y pareja ejemplar: ya sea de memo (su alcalde cívico) o del burro (su otro novio y apadrinado).

Incluso, desde otro punto de vista: “Carlos quiere a los pobres; yo no. Carlos hace caridad; yo no. Carlos se duele de la desgracia ajena; yo no. Carlos tiene fe en la vida; yo no. Carlos reza; yo no. Carlos siembra; yo no. Carlos construye; yo no. a Carlos le gustan los muchachos; ¡a mi también!”. (Vallejo F. 2004, p 55);
Resulta interesante la descripción que hace Vallejo en sus propias palabras de su hermano por dos aspectos.
El primero, debido a que aquí, se evidencia lo ya anteriormente expuesto, refiriéndonos a la bondad y la “guevonada de Carlos”. Bien lo dijo nuestro autor: “el que se elija para el bien del prójimo, y no para el propio es un güevon”; y en eso, creo que muchos estarán (o estaremos) de acuerdo, después de evidenciar mas y mas campañas y mandatos en este país. Aquí, con toda seguridad, es improbable que esté el bien común sobre el individual.

Hipótesis, y mas hipótesis se generan alrededor del tema: ¿que el poder corrompe?; yo digo que si. ¿Que solo quieren llegar allá por el dinero, y no por el pueblo?; en la mayoría de los casos es así. ¿Qué cumplen la mitad de lo que dicen?; yo digo que no, ni la mitad, porque unas promesas las modifican, y otras nunca las dijeron.
Y el segundo aspecto, podrá sonar un tanto irrelevante e intrascendente, pero de este se desprendieron bastantes problemas e historias. Carlos, era homosexual.

A Carlos le gustan los muchachos:
¿Cuanta polémica pudo haber generado, o mejor, genero, que el pueblo hubiese elegido a un “cacorro”, (como lo describe su hermano), para gobernarles? La homosexualidad en un país, y específicamente en un pueblo tan conservador es difícil de digerir: tanto por el hecho de que hombre es con mujer y mujer con hombre, y no, hombre con hombre y mujer con mujer. O porque la religión lo prohíbe (óigase bien, “lo prohíbe”)

¿A quien prohíbe la iglesia la homosexualidad?, ¿a sus fieles?. ¿solo el rebaño aplica en la regla?; ¿o también el pastor?. Preguntas como estas seria bueno formularlas mas a menudo.
La campaña, afortunadamente no se vio nunca empañada por escándalos de este tipo (o al menos no muy graves) y toda esta discreción sirvió para que las aguas estuvieran calmadas en dichos periodos.

El interés de describir este tema, radica básicamente en el contexto sociocultural que se presenta en los ciudadanos de un sitio como este.
Si bien, la censura en cuanto al tema de la sexualidad ha disminuido con respecto a otros siglos. Es pertinente reiterar los postulados expuestos con relación a la forma de ver el mundo por parte de personas con una educación, formación y conciencia moral conservadoras.

El contraste más simple lo podemos realizar entre los habitantes de una gran urbe o ciudad y los residentes de un municipio “perdido en las montañas”.
La tolerancia hacia un tema como estos, seguramente será mayor en la comunidad de la ciudad; no porque los valores estén desintegrándose, sino porque la libertad de la critica es mas amplia y la explicación religiosa no convence a todos (no podemos ser reduccionistas en torno a estos dos aspectos, pero si podemos decir que son muy comunes.).

Entonces, con esto se tiene la posibilidad de poder en algún momento abordar un caso específico. Como el de un homosexual (con fama o sin fama) que tiene interés en obtener un cargo publico para gobernar.
Seria muy interesante si alguna ves se diera o se tuviera registrado un caso como este: donde gran parte de los votantes conozcan esa parte de la vida personal del candidato (Naturalmente, es una idea que resulta para muchos inconcebible, tanto por la integridad de la persona, como por la de su campaña. Pero la invitación principalmente se hace  al caso hipotético, donde  pueden surgir muchas especulaciones).

El tema de la homosexualidad, y la pederastia son incómodos, pero hay que abordarlos. ¿Qué hubiese sucedido con la campaña de Carlos, si todos sus votantes se hubiesen enterado de su condición? Y además, que a falta de un novio, ¡tenia dos!.. Por supuesto, esto no fue un impedimento para llegar a la alcaldía, y en ningún lugar debería serlo.

Pero, saliéndonos de este interminable discurso; también podemos recordar aquellas anécdotas que se presentan a lo largo de la historia, que involucran por ejemplo a su alcalde cívico: memo.

Memo, luego de que Carlos dejara su legado intacto y con mas de treinta tutelas en contra (por los mal agradecidos electores) se postulo para ser alcalde de Támesis, teniendo como rival al negro alirio. En esta ocasión fue este ultimo quien se llevo la victoria (efímera pues las cosas se le complicaron).
Memo siempre estuvo al lado de Carlos apoyándolo. Si hacemos una investigación un poco mas profunda a los hechos, podríamos atrevernos a decir que el papel femenino en la relación lo tenia memo.

Aquellas interminables búsquedas de los votos en cada una de las veredas y corregimientos del pueblo, son suficientes para darle el titulo de “alcalde cívico” (como lo hemos reiterado en el transcurso del texto).
Un cuento de hadas:

El papel persuasivo lo tenía Carlos, y su fama le precedía en cada esquina; pero, aun así su honorabilidad no la ponía en juego nadie.
Resulta inimaginable y a la ves extraño aceptar y comprender lo que postula Vallejo en relación al desempeño de su hermano. Carlos, con toda seguridad, parece un personaje salido de un cuento de hadas.

Todo lo que hizo por su pueblo no tiene nombre. Si bien no se especifica cada una de las promesas que hizo, se puede dar constancia a ojos cerrados de que cumplió la mayoría. Y ¿Cómo le pagaron?. Pues con tutelas y mas tutelas.
Soy demasiado escéptico con este tema, pero si algo podemos defender de Vallejo es que es realista y esta historia fue real. Entonces, ¿quien no quisiera un alcalde para su localidad como Carlos?

Su campaña no fue sucia, fue totalmente normal. Digo normal, porque las campañas son así, con todo lo que llevo la de Carlos: votos de muertos, muertos a causa de los votos, nacimientos inesperados, promesas incumplidas y a la ves lo mas extraño ¡promesas cumplidas¡. Todo esto y mas, tuvo esa campaña que le valió la alcaldía.
Innumerables acciones a favor de la campaña y en contra se registran, pero al fin y al cabo el resultado valió todo el esfuerzo. Un esfuerzo que a lo mejor no todos lo ponen de la misma manera, pero que al fin y al cabo es esfuerzo.

Y la epopeya que vivenciaron los personajes aludidos tuvo su recompensa en un alcalde salido de una película de ciencia ficción.

Para finalizar:
En este recorrido (un poco argumentativo si se quiere ver). Deseo manifestar mi admiración y gusto por las obras de Fernando Vallejo.
Para muchos, resulta complicado aceptar las posturas que este hombre plasma en sus libros. y es que, un tema tan controversial; por ejemplo, como lo es la religión católica y sus secretos y negaciones, definitivamente no resulta fácil de asimilar en un país como el nuestro, o como cualquiera que sea tan conservador.

Es preciso conocer la vida y obra de Vallejo, su pesimismo tiene una razón de ser, su pensamiento tiene una razón de ser. Este hombre que posee un desprecio y a la vez una profunda lastima por Colombia, resulta pesimista, y al mismo tiempo realista.
Con respecto al tema tratado en el transcurso de este escrito, debo decir que la democracia nunca tendrá satisfecha a la mayoría pero desafortunadamente vivimos en un sistema que no admite o permite otra forma de elección (todo seria más justo si no hubiese tanta corrupción; pero, es tan improbable como utópico. Entonces, por ahora dejemos las cosas así.)

Definitivamente no es la voz del pueblo, sino la voz de los que logras convencer y obligar. Y esto nuevamente lo podemos constatar en la obra e infinidad de elecciones.
A pesar de que generalizar puede ser peligroso, me atrevo a decir que dudo de la existencia de una campaña limpia y honesta, por lo menos en este departamento
Bueno, aunque esa idea romántica de la campaña limpia, es demasiado utópica e idealista, pero al menos que podamos decir: “no robo tanto como el otro”, o “al menos hizo mas, que el otro”

Mi hermano el alcalde, nos deja mucho en que pensar, reflexionar e incluso omitir. Por un lado, encontramos todas las anécdotas de un peculiar personaje que logra su objetivo, dejando mas sonrisas que caras largas, a pesar de que los tamesinos sean tan mal agradecidos con un ilustre alcalde como lo fue Carlos. Y por el otro, esta la historia de una campaña, que trae detrás de si crímenes, delitos, pero al fin y al cabo, lo que hizo Carlos no es ni mas ni menos honorable que lo que se hace a diario en una situación análoga.

Gran obra, gran hombre. Que invita a abrir los ojos en muchos temas, pero en mi pensamiento e interpretación concluyo todo este maravilloso recorrido diciendo: ¿Cuantos años llevamos con esta democracia?. ¿Y de que nos ha servido esta democracia?. ¡Represión y tortura, en esta democracia! Tantos años de cambio, ¡y aquí no ha cambiado nada!.


Bibliografía:
VALLEJO, Fernando. Mi hermano el alcalde. Ediciones alfaguara, 2004

Cibergrafia:
www.youtube.com   búsqueda: La Desazón Suprema Fernando Vallejo
www.youtube.com   búsqueda: FERNANDO VALLEJO
http://www.trazegnies.arrakis.es/fvallejo.html

Relatoria N.15

Universidad de Antioquia
Departamento de Psicología- Regionalización
Seccional Oriente
Curso Español 1 Sociales
Semestre 2010-2

Relatoría N°15



Fecha: Noviembre 26 de 2010
Tema: Trabajo final: “Ensayo obra literaria”
Relatores:
Yurany Andrea Castaño Saldarriaga
Natalia Montoya Montoya
Palabras clave: Ensayo, obra literaria, evaluación, título, autor

Contenidos desarrollados en clase:
Esta sesión se presentó como la última clase del curso español 1 sociales del programa de regionalización de Psicología Oriente. Para ello se dividió el trabajo desarrollado en dos sesiones. En la primera se dieron las pautas respectivas por parte del docente para el desarrollo de la calificación del mismo curso. Así mismo, se hizo énfasis en este día a la exposición del trabajo final de cada uno de los estudiantes, lo que continúo también en la segunda parte. Se finalizó con recomendaciones y pautas a seguir en el curso dictado.
Desarrollo argumentativo:
El primer tema abordado hizo referencia a la forma de calificación y a las respectivas fechas planteadas de la misma en el curso español 1 sociales. A continuación se abrió paso a las exposiciones del trabajo final del área que consistía en la exposición de los aspectos más relevantes presentados en el ensayo de cada estudiante de acuerdo a la obra literaria trabajada. Para ello, algunos hicieron presentaciones en power point y otros tantos expusieron sin ayuda visual. De acuerdo con lo anterior se planteará a continuación el número de obras expuestas junto con el respectivo nombre del estudiante, el título otorgado a su ensayo, la obra literaria original y su autor.

1. Cristian Ramírez Gallego: “No le temas a la muerte, deja que esta te acaricie”.
- La Hojarasca: Gabriel García Márquez.
2. Ana María Zapata: “El viejo que seremos”.
- Diario de la guerra del cerdo: Adolfo Bioy Casares.
3. Lina María Serna: “En los tiempos de la brujería”.
- Los cortejos del diablo: Germán Espinoza.
4. Natalia Montoya: “Arte culinario: Lenguaje de amor y pasión”.
- Como agua para chocolate: Germán Espinoza.
5. Cristian Daniel Montoya: “Alucinación o realidad en la invención de Morel”.
- La invención de Morel: Bioy Caseres.
6. Juan David Ocampo: “Aura: deseos de juventud eterna”.
- Aura: Carlos Fuentes.
7. Diana Jurado: “El diario de una fantasía sexual”.
- La habana para un infante difunto: Guillermo Cabrera Infante.
8. John Alexander González: “Lozano un conservador que hizo historia”.
- Cóndores no entierran todos los días: Gustavo Álvarez Gardeazabal.
9. Juan Diego García: “Por cada risa hay cien lágrimas”.
- Erase una vez el amor y tuve que matarlo: Efraín Medina Reyes.
10. Julieth Chinchilla: “El misterio de Comala”.
- Pedro Páramo: Juan Rulfo.
11. Juan Guillermo García: “El amor, un ciclo de grandes emociones y un triste final”.
- Angelitos empantanados: Andrés Caicedo.
12. Yurany Andrea Castaño: “Contemplar el cielo para caer en un infierno”.
- Delirio: Laura Restrepo.
13. Luisa Fernanda Castaño: “En busca de un lugar”.
- El juguete rabioso: Robert Arlt.
14. Santiago Ceballos: “Incursiones musicales en Versalles”.
- Que viva la música: Andrés Caicedo.
15. Yesenia Cardona: “El general y su poder eterno”.
- El otoño del patriarca: Gabriel García Márquez.
16. Claudia Yesenia Cardona: “Luterito en nombre de dios, rojos y azules”.
- Luterito: Tomás Carrasquilla.
17. Daniela Botero: “La historia de él”.
- Los caballitos del diablo: Tomás González.
18. Juan Pablo Arroyabe: “El fin justifica los medios”.
- Mi hermano el alcalde: Fernando Vallejo.
19. John Edwer Bernal: “TTT- Descripción de un mundo infante”.
- Tres tristes tigres: Guillermo Cabrera.
20. Karen Arenas: “El yo y el mundo”.
- Abaddón el exterminador: Ernesto Sábato.
21. Mónica Julieth Soto: “La fuerza del amor”.
- El amor en los tiempos del cólera: Gabriel García Márquez.
22. Deisy Julieth Tobón: “El amor, la guerra y la enfermedad: recuerdos que perduran la muerte”.
- La muerte de Artemio Cruz: Carlos Fuentes.
23. Sebastián Ortiz: “Crítica desmembradora de conceptos establecidos por una cultura de doble moral, cobijada y cortada por el sutil poder”.
- El desbarrancadero: Fernando Vallejo.
24. Alejandra Osorio: “Enterrar nuestros malos recuerdos. ¿Es realmente el camino a la libertad?”.
- Tokio ya nos quiere: Ray Loriga.
25. Eliana Zuluaga: “Fracaso literario”.
- Bartleby y compañía: Enrique Vila- Matas.
26. Juan Carlos Rojas: “Pie de muerte en la sangre”.
- Espejo sombrío: Fernando Osorio.
27. Gloria Fernandez: “El juego de la vida”.
- Los premios: Julio Cortazar.
28. Yenny Ocampo: “Paraíso o infierno”.
- Los caballitos del diablo: Tomás González
29. Luisa Hincapié: “Cronopios, famas y esperanzas más allá de un cuento mítico”.
- Historia de cronopios y famas: Julio Cortazar.
30. Helber Andrés: “Crimen sin un criminal”.
- La pista de hielo: Ernesto Sábato.
31. Natalia Román: “Una realidad fuera de base”.
- Laureles…: Ernesto Sábato.
32. Adriana Ospina: “Opio, un oscuro derecho a la delicia”.
- Opio en las nubes: Rafael Chaparro.
33. Eliana Cardona: “Aquila símbolo imperial norteamericano”.
- Ante los bárbaros: José María Vargasvila.
34. Carolina Silva: “Don Rigoberto: Fantasía y erotismo”.
- Los cuernos de Don Rigoberto: Mario Vargas Llosa.
35. Paula Andrea Vergara: “La muerte nos llega a todos”.
- El desbarrancadero: Fernando Vallejo.

El día se finalizó con las recomendaciones y las fechas estipuladas (1 de diciembre) para concretar los trabajos virtuales pertenecientes al blog del curso.

Pendiente: Colocar en el blog las 15 relatorías, la caracterización del personaje, el final alternativo, la reseña de la película, el comentario de texto y el ensayo de la obra literaria.
Bibliografía: Dada en cada obra literaria.

Relatoria N.14


Universidad de Antioquia
Departamento de Psicología – Regionalización
Seccional Oriente
Curso: Español I Sociales
Semestre: 2010-I.


Relatoría No.14
Fecha: Noviembre 20 de 2010
Tema: Habilidades comunicativas y expresión oral.
Relatores:
Cristian Ramírez.
Gloria Fernández.
Palabras claves: Dicción, crear, interpretar, producir, comunicar, pronunciación, coherencia, claridad, gestos, señas, hablar, escuchar, semántica, ritmo, competencias comunicativas: lingüística, paralingüística, quinésica, proxémica, pragmática, estilística, textual (cognitiva, semántica).

Contenidos Desarrollados En La Clase:
Penúltima clase del curso del curso Español I Sociales del programa regionalizado de psicología Oriente. Se da inicio a la clase con la lectura de la relatoría N°14, en vista de que no hay comentarios y/o sugerencias por parte de los compañeros ante la misma, el profesorrecomiendaa la clase a realizar ejercicios de dicción para mejorar la pronunciacióncon técnicas como el silabeo, que consiste en descomponer las palabras silaba por silaba, y la lectura palabra por palabracuyo ejercicio se basa en leer un texto de atrás hacia adelante.
Posteriormente se da inicio a la parte teórica pertinente a la clase, que corresponde a las 7 competencias para desarrollar habilidades comunicativas; habilidades que fortalecen las 2 principales: hablar y escuchar, fundamentales para la psicología.En la segunda parte de la clase el profesor realizó la asesoría a cada alumno sobre su ensayo y evaluó aspectos como: extensión, puntuación, uso de mayúsculas, intención del texto, satisfacción con el mismo por parte del alumno; mientras el profesor realizaba dicha asesoría, el resto de compañeros leíamos un texto complementario y realizábamos un taller y …..Competencia comunicativa de Carlos Alberto Rincón.

Desarrollo argumentativo:
El profesor expuso cada una de las competencias comunicativas, las cuales son:
1. Competencia Lingüística: capacidad del hablante para producir, comunicar e interpretar signos. Es una capacidad básica que todo ser humano tiene, pero su desarrollo está sujeto al entorno sociocultural del sujeto.

2. Competencia Paralingüística: es la capacidad del uso de los signos, pero no solo el uso, sino el uso adecuado, la actitud y la forma en que nos expresamos, incluye: tono de voz, postura, gestos, movimientos, forma de expresión para lograr el efecto deseado, reconocer el contexto.
Esta competencia se evidencia más en conversaciones, en las cuales hay que saber manejar el tono de la voz en cuanto al contexto, el énfasis en lo que se dice, la lentitud o rapidez (cadencia o ritmo), la pronunciación, los acentos, la claridad en la dicción, la coherencia, la fluidez, el vocabulario y la emotividad.

3. Competencia Quinésica: Se manifiesta en la capacidad consciente o inconsciente para comunicar información mediante signosgestuales, como señas, mímica, expresiones faciales, variados movimientos corporales, etc. Estos signospueden ser expresiones propias o aprendidas, originales o convencionales.

4. Competencia Proxémica:capacidad que tiene el hablante para manejar el espacio y lasdistancias interpersonales en las que se debe tener conciencia de ciertas barreras .Hay 3 niveles de distancia en los actos comunicativos:

• Espacio íntimo: se da en las relaciones afectivas cercanas como la que tenemos con la familia.
• Espacio formal: se da en las relaciones jerárquicas como en lo laboral, en la que la distancia es más o menos de la longitud de los brazos.
• Espacio social: se presenta en situaciones en las que hay que incluir a una mayoría, como estar en un escenario frente a un público.

5. Competencia Pragmática:Es el conjunto de conocimientos no lingüísticos que tiene interiorizados el hablante como: transmitir una intención, adaptarse a las circunstancias, etc...

6. Competencia Estilística: se manifiesta en la capacidad para sabercómo decir algo (entorno, contexto) ycuál es la manera más eficaz de conseguir la finalidad del acto de habla (condicionamiento).
Las actitudes estilísticas del hablante hacia su interlocutor -como la cortesía, laamabilidad, la paciencia, el enfado, la displicencia - son determinantes en la estructuración de los enunciados.

7. Competencia Textual: es la capacidad para articular e interpretar signos organizados en un todo coherente. Hacen parte de ésta:

• La capacidad semántica:cuando le asignamos el significado adecuado a cualquier signo o establecemos surelación con un referente determinado, cuando comprendemos el sentido de unafrase u oración o cuando realizamos la interpretación global de un texto.

• La capacidad cognitiva:es la enciclopedia cultural de cada hablante-oyente que hace posible que podamos comprender e interpretar y reconocer contenidos científicos, socioculturales o ideológicos de un texto.

Al finalizar la primera parte de la clase el profesor nos da los pormenores sobre la exposición de nuestros ensayos: debe ser una exposición breve y puede ir acompañada de una diapositiva, una canción o algo que represente tanto a la obra como al ensayo.

Queda pendiente para la próxima y última clasela exposición del ensayo que cada uno realizó, junto con la actualización del blog.